
José Mazaira, psiquiatra infanto-juvenil: «En cada clase, hay algún niño que padece TDAH»
Hasta el año 2021, los psiquiatras infanto-juveniles vivían una situación similar a la que a día de hoy siguen viviendo algunas especialidades no reconocidas oficialmente en España. Por ejemplo, pese al nivel de excelencia y reconocimiento con el que cuentan algunos genetistas —para ejemplo, el de Ángel Carracedo—, no existe una especialidad como tal. Era lo que les pasaba a estos especialistas de la psiquiatría hasta el verano de hace un par de años. No es que no existiesen, porque estar estaban, como reivindica José Mazaira, jefe del servicio del Complexo Hospitalario Universitario de Santiago. «Que se creara ahora la especialidad de psiquiatría infanto-juvenil, no quiere decir que no existiese. Siempre la hubo, lo que pasa es que era una sección que dependía de psiquiatría». Si tardó tanto en aparecer fue por cuestiones que dependían más de lo político que de lo clínico, una batalla sobre a quién debía pertenecer la atribución: si a pediatría o a psiquiatría. Sea como fuere, ya está aquí. Se hacía necesaria teniendo en cuenta que muchos trastornos de la esfera psiquiátrica comienzan a manifestarse en la primera infancia.